Factores humanos: ¿Es el acompañamiento emocional tarea del líder?

¿Cuántas veces te paras a preguntar a tus colaboradores por su estado emocional? ¿Crees que esto influye en la ejecución de sus tareas? ¿O quizá eres de los que piensa que los problemas personales se deben quedar en casa?

Cuando pensamos en un líder nos imaginamos a una persona con poder, capaz de gestionar equipos grandes de trabajo, con capacidad para organizar las tareas de manera que seamos lo más productivos posible, y además que ayude a sus colaboradores para orientar la ejecución de las tareas con seguridad. Pensamos también en una figura que motiva y alienta a sus trabajadores y les ayuda a desarrollarse profesionalmente de la manera más adecuada, a través de la formación y los apoyos necesarios para llevar a cabo su trabajo.factores humanos

Pues bien, pocas veces nos paramos a pensar en la importancia que tiene que un buen líder sepa gestionar los factores humanos más básicos, los factores emocionales.

Las emociones son una parte básica y esencial en todo ser humano, por lo que intentar hacer actividades en el trabajo o en cualquier ámbito deslingándose de las emociones o no tener en cuenta dichas emociones, así como la activación emocional que tenemos en cada momento, es un acto de insensatez.

Las personas, por naturaleza, desarrollamos nuestro trabajo influidos por múltiples variables que harán que desempeñemos las tareas con más o menos éxito y con más o menos fiabilidad. Y una de las variables más importantes y que además, por su carácter interno, es menos susceptible de ser modificada, es la falta de control emocional. Es decir, si alguien pretende llevar a cabo una actividad con un nivel de activación emocional muy alto o muy bajo, ya sea de carácter agradable o desagradable, es mucho más probable que en ese proceso de ejecución de la tarea se comentan errores, que pueden ser leves, o pueden tener consecuencias más graves, porque su atención se va a focalizar en cómo se está sintiendo en vez de en la actividad que está realizando, y por tanto su percepción de los riesgo va a ser también menor, por lo que será más probable que cometa algún error.

Es por eso que, una de las tareas más importantes del líder es saber orientar a sus colaboradores en materia de factores humanos como variables influyentes en su desempeño, y brindarles orientación y herramientas para que aprendan a medir su activación emocional en cada momento del día.

Porque no se puede pretender que las personas dejen sus emociones en la puerta de la organización cuando empiezan el día, las recojan de nuevo al finalizar, y creer que eso es algo que no debe afectar a nuestro desempeño. Obviamente, es algo que debemos aprender a gestionar aunque necesitemos un guía que nos indique cómo hacerlo, pero intentar desprendernos de ellas durante el trabajo es misión imposible, porque las emociones como muchas otras variables conforman nuestro perfil como personas y como profesionales.

Así que, efectivamente, el acompañamiento emocional es tarea primordial de todo buen líder que se precie, que sepa entender la importancia que tienen los factores humanos y que guíe y ayude a incrementar las capacidades y la autonomía de sus colaboradores en todos los aspectos del trabajo.

De esta forma, centrándose en las características de cada colaborador conseguirá sacar siempre lo mejor de ellos, y les enseñará a autogestionarse de la manera más adecuada posible para, de esta manera, también incrementar el rendimiento de su organización.

L.A.