Lo inesperado… ¿cómo reaccionas tú?

Vivimos en un entorno de continuo cambio, de un día para otro tu entorno es diferente y tienes que gestionar tu día a día sin saber qué novedades tendrás hoy y cuáles serán tus retos diarios. Durante toda la vida hay que gestionar lo inesperado.

Hace ya bastante tiempo que leí una noticia sobre lo ocurrido en un vuelo comercial. El avión partió de Caracas y tenía como destino Miami, pero un motor falló. La reacción de las diferentes personas ante este evento inesperado fue muy diferente. La mayoría de ellas se pusieron a rezar, pero lo que llamó la atención a la persona que lo compartió por redes sociales, fue como uno de los pasajeros prefirió beber alcohol, y no dudo en compartirlo con un pasajero que estaba cerca de él.

Si tú, como yo, has cogido alguna vez un vuelo, sabrás que los aviones son el medio de transporte más seguro, los protocolos de seguridad están muy claros y todo el equipo de tripulantes tiene muy claras sus funciones, pero los pasajeros no siempre sabemos qué pasa, ni qué debemos hacer.

Inesperado

Este ejemplo me parece que muestra muy bien la propia naturaleza humana, diferentes reacciones ante el mismo evento, diferente nivel de estrés (al menos en su componente externo), diferente percepción del riesgo y, con todo esto, diferente proceso de toma de decisiones y conducta final.

Este año, para mí, está siendo el ejemplo perfecto de lo inesperado. En estas semanas está comenzando el curso escolar en toda España. Pero ¿todos los padres están viendo y viviendo esta situación por igual? ¿Y los profesores? ¿Y los alumnos?

Para que los eventos inesperados sean los mínimos posibles se están desarrollando muchísimos procedimientos, pero no hay que olvidar dos cosas. La primera de ellas es que el papel todo lo soporta; mientras que la segunda es que no todo se puede prever y es necesario saber gestionar las situaciones nuevas, es decir, lo inesperado.

Para poder gestionar correctamente lo inesperado resulta imprescindible gestionar correctamente los cambios que suceden en nuestro entorno y tener las claves para mejorar el rendimiento en entornos VUCA. Las empresas que sobreviven y los profesionales que destacan son aquellos que ante una situación inesperada se adaptan, aprenden y crecen.

Estas personas que se adaptan ante lo inesperado son cruciales en tu equipo, no se bloquean,  buscan una solución y siempre quieren aprender y mejorar. Además no tienen miedo a reconocer lo que pueden mejorar y no dudan en poner en práctica planes de acción para seguir creciendo.

Y tú, ¿Cómo habrías reaccionado en el avión?

R.A.