La Integridad en las organizaciones

Uno de los valores que más frecuentemente declaran las empresas es la integridad. Una persona íntegra es aquella que siempre hace lo correcto, que hace todo aquello que considera bueno para sí, sin afectar los intereses de otras personas. Integridad se traduce como honradez, honestidad, respeto por los demás, corrección, responsabilidad, control emocional, respeto por sí mismo, puntualidad, lealtad, pulcritud, disciplina, congruencia y firmeza en las acciones. En general, una persona íntegra es alguien en quien se puede confiar.

Igualmente, para Martin Brainon, la integridad es uno de sus principios básicos, y se valora en todas y cada una de las personas que tienen relación con la empresa.

¿En tu entorno se fomenta la integridad de los trabajadores? ¿Los directivos son profesionales íntegros? ¿Se aprecia que los colaboradores sean congruentes entre lo que dicen y lo que hacen según los valores de la cultura de la empresa?

Hoy en día la integridad es un valor muy preciado; por tanto, cuando una se encuentra con una compañía que demuestra ser un ejemplo en este ámbito y es coherente con lo que afirma y con su forma de actuar, merece al menos, un espacio en este post.

Me explico: A finales del año pasado tuve que renovar el seguro de mi coche. En Mutua Madrileña) me dijeron que, si renovaba la póliza con ellos, me regalarían un bono con ciento cincuenta euros en puntos para gasolina, que podría utilizar en una de las distribuidoras más conocidas del país asociada a ella. Me aseguraron que el regalo se haría efectivo cuarenta y cinco días después de la renovación. Después de varios minutos de conversación, me convencieron y renové el seguro con la Mutua.

Pasaron sesenta días y yo no había recibido mi regalo, por lo que me puse en contacto con ellos por teléfono. La persona que me atendió, muy amablemente, me contestó que estaban “finalizando los cierres del año anterior” y que, en quince días, tendría mi bono de gasolina. Pasó otro mes y seguía sin recibirlo. En esta situación, lo primero que se me ocurrió fue pensar que, de nuevo, igual que en otras muchas ocasiones y como hacen muchas otras empresas, me estaban dando largas y no me iban a enviar mi regalo jamás. Otro mes después, volví a llamarles, ligeramente enfadada y, la persona que me contestó, esta vez se excusó diciendo que habían “tenido una incidencia” pero que, en el plazo máximo de quince días me llegaría mi bono.

¿Adivinas qué pensé en ese momento?… Exacto; suponía que nunca recibiría el regalo, que había sido engañada como “es habitual en este tipo de situaciones”.

Esta misma operación se repitió dos veces más. Yo llamaba por teléfono, y cada una de las personas que atendía mi llamada decía lo mismo, que había una incidencia y que me prometían que llegaría mi regalo en un par de semanas. Por otra parte, en ese periodo, recibí una carta en la que me felicitaban porque “según había acordado con ellos, recibiría mi bono en el 2020”. Total, que como este bucle no me aportaba nada y estaba convencida de que no iba a conseguir lo prometido, decidí aparcarlo mentalmente hasta que se acercara la siguiente fecha de renovación del seguro.

Sin embargo, para mi sorpresa, cuando ya lo había dado por perdido, recibí un sms a mi móvil que decía que, por una incidencia de la empresa de carburante asociada, no podrían hacer efectivo el bono y, por tanto, me ingresarían la cantidad acordada a mi cuenta bancaria ¿Te lo puedes creer? Después de tantos meses parecía que, efectivamente, todo lo que la compañía aseguradora me había estado diciendo, iba a resultar cierto. Y, así fue; un buen día, encontré en mi cuenta el dinero prometido.

Esta experiencia me lleva a dos reflexiones. La primera es que, a veces, mis creencias y prejuicios me ayudan a darme cuenta de que estoy equivocada cuando juzgo acciones ajenas, lo que me proporciona oportunidades para el aprendizaje. La segunda es que, parece que, hasta donde yo conozco, Mutua Madrileña puede considerarse como un buen ejemplo de integridad. Por eso, desde aquí quiero enviarle mis felicitaciones, agradecerle su compromiso conmigo y animarle a que siga por ese camino.

O.P.