Gestión del Riesgo en el Trading: “Deja tus emociones a un lado”

Es muy curioso observar cómo existe una tendencia muy fuerte en el mundo del Trading, más concretamente en el apartado de psicología del riesgo, donde se trabajan las emociones desde un punto de vista defensivo, y pueden encontrarse frases del tipo “deja las emociones a un lado”.

Sin embargo, al mismo tiempo, es fácil encontrar expresiones como “el sentimiento del operador” o teorías que hacen alusión de forma directa a las emociones como la “Ley del sentimiento contrario”.

Como ya he comentado en anteriores post, a la hora de evaluar un riesgo, entran en juego numerosas variables que hacen que lo subestimemos o lo sobreestimemos.

Esa adecuación del nivel de percepción, es la clave para cualquier operación bursátil, y al contrario, de lo que el mundo del trading promueve, que se basa en el control y aislamiento de las emociones durante la ejecución de las operaciones, éstas deben operar a nuestro favor y aceptar que más del 90% de las decisiones que tomamos son puramente emocionales.

Leyendo diversas webs especializadas en trading, encontré esta frase que resume brevemente ese enfoque: “La mejor manera de protegerse a uno mismo ante las emociones que impactan negativamente es sus decisiones, es tratar al trading como una empresa”.

¿Protegerse de las emociones?

La activación emocional es una de las variables más potentes a la hora de evaluar los riesgos en la toma de una decisión. Afianzar el proceso de decisión, en que la emoción se debe aislar o controlar, es ir en contra del funcionamiento natural de cerebro, puesto que es imposible “desconectar” esa parte emocional. El miedo, la euforia o la sorpresa afectan profunda y decisivamente en nuestras decisiones.

Tomando como referencia dos de los sistemas principales con los que opera el cerebro, el sistema de recompensa cerebral y el de aversión a la pérdida, partir de una posición defensiva ante nuestras propias emociones da mayor peso a éste último, haciendo que operemos pensando en lo que vamos a perder y no en lo que vamos a ganar.

Inclusive los mejores traders sufren pérdidas en algún punto, es parte del trading. La clave es limitar sus pérdidas a un nivel manejable, que permita seguir teniendo alguna operación que ofrezca ganancias, activando así el sistema de recompensa cerebral.

En definitiva, el manejo de las emociones en el trading, debe estar enfocado desde una visión centrada en el beneficio y no en una posición defensiva.

Suerte con tus operaciones y ¡a jugar!

N.A