¡El verano ya está aquí! ¿Cómo llevas el calor y las altas temperaturas?

El verano ya está aquí, y con él: el calor. Para muchos el calor es una bendición, pero estaremos de acuerdo en que la gran mayoría sufrimos enormemente las altas temperaturas que alcanzamos en pleno verano en nuestro país. El calor tiene sus ventajas, como los baños en la piscina y la playa, los parques acuáticos, las vacaciones… pero no todo son cosas buenas.

Tanto es así, que hoy os vengo a hablar de cómo afectan estas temperaturas a nuestro cerebro, y hasta qué momento es beneficioso, o perjudicial para tu salud.

¿No has sentido nunca esa fatiga y cansancio de no querer hacer absolutamente nada en pleno verano? Esto sucede porque nuestro cerebro funciona correctamente hasta los 35-40 grados centígrados. Pero cuando se superan estas temperaturas, el cerebro empieza a no actuar de la misa forma.

Los motivos por los que nuestro cerebro, y con el nuestras neuronas, no funcionan bien a altas temperaturas son:

Existe mayor riesgo de deshidratación.

Hidratarse correctamente y beber líquidos es imprescindible (no sólo en verano). Tener una deshidratación superior al 2% de nuestro peso corporal producirá una pérdida de concentración y de memoria a corto plazo.

Solemos descansar peor.

Cuando el organismo se tiene que adaptar por la noche a las altas temperaturas se produce una hiperexcitación cerebral y nos costará más dormirnos. Con esto llega un aumento de la ansiedad, estar más cansados, y tener peor genio.

El hipotálamo tendrá que hacer horas extra.

Esta región del cerebro se encarga de mantener nuestro cuerpo a una temperatura estable, pero al hacer tanto calor, el hipotálamo tendrá que hacer un esfuerzo extra para adaptarse.

Algo bueno que tenemos los humanos, es que tenemos la capacidad de adaptarnos al medio, así que espero que estas altas temperaturas que estamos viviendo no te sean un suplicio y las lleves lo mejor posible, y recuerda:

Hidratarse es imprescindible.

¡Feliz verano!